Escocia ha provisto al mundo del cine de un telón de fondo perfecto para grabar sus películas, muy en parte gracias a su vigoroso paisaje, a sus imponentes vistas, villas pintorescas, castillos en ruinas llenos de Historia y a sus hermosas playas.
Muchos directores han vuelto la vista a este precioso país, inspirador de historias y sentimientos, por contar con unas localizaciones casi de ficción en su increíble belleza.
A continuación te presentamos, en orden cronológico, algunas de las películas más famosas que se han rodado o tomaron como fuente de inspiración algún lugar de Escocia. Hablaremos de títulos tan señeros como “Harry Potter”, “Braveheart”, “Local Hero”, “Trainspotting” o “James Bond”.
Whisky Galore!/Tight Little Island (“¡Whisky a raudales!”/”La pequeña Isla”) (1949)
La que os presentamos primero es una entrañable comedia realizada por los estudios “Ealing Comedy Film”, basada en la novela del mismo nombre, “Whisky Galore!” y escrita por el famoso autor nacionalista escocés Compton MacKenzie, que a su vez se basó en un suceso real.
En 1941 el buque “S.S. Politician” naufragó en una de las pequeñas islas que componen las “Outer Hebrides” (Hébridas Exteriores), Eriskay, situada entre las islas de “South Uist” y “Barra”, donde finalmente se rodó la película.
Esta embarcación partió desde Liverpool el 3 de Febrero de 1941 con destino a Kingston, Jamaica y Nueva Orleans, donde estaban destinados a descargar las 28.000 cajas de whisky de Malta que el navío transportaba.
Sin embargo, no pudieron llegar a su destino porque la fortuna hizo que se toparan con una terrible tormenta marina que partió el barco en dos y provocó su hundimiento muy cerca de la costa de la Isla de Eriskay. Parece que la tripulación no sufrió daños y fueron muy bien acogidos entre los habitantes de la Isla, quienes cuidaron de los marineros por un tiempo y gracias a ellos descubrieron en qué consistía su cargamento.
A partir de ahí organizaron toda una serie de operaciones de “rescate” ilegales al caer la noche, preparadas para tomar salida antes de que los oficiales de tasas de aduanas y cobradores de impuestos llegaran a requisarlo.
(A continuación se desvelan partes de la trama)
La película narra cómo se desarrollaron los acontecimientos, en clave cómica, en esta pequeña Isla que se había quedado sin suministro de whisky por culpa del racionamiento que conllevó la guerra.
De ahí viene la famosa frase del film que asustó a todos los habitantes de la “Isla de Todday” (nombre ficticio que le dieron al islote en la cinta): “…in 1943 disaster overwhelmed this little Island, not famine, nor pestilence. Nor Hitler´s bombs, or the hordes of an invading army. But something far, far worse: There is no whisky!” (“…en 1943 la desgracia sobrecogió a esta pequeña Isla. No fue la hambruna, tampoco una epidemia de peste. No fue un bombardeo de Hitler, ni la multitud de una armada invasora. Fue algo mucho, mucho peor: ¡No queda whisky!”).
Dadas las circunstancias, el hundimiento de este barco plagado de whisky parecía casi un milagro, así que representaron a los propios residentes de Todday aprovechando este prodigio caído del cielo y, a pesar de la oposición de las autoridades británicas, saquearon todos los barriles que pudieron.
Los dirigentes intentaron recuperar el alijo tomado de forma ilegal pero los astutos vecinos de la Isla se las habían ingeniado escondiendo el whisky en lugares remotos: cajas de munición, falsos techos y, sobre todo, en sus estomágos.
Cuando se descubrió el desastre, Wagget, el estirado capitán inglés encargado de la guardia de la Isla, fue llamado al continente para explicar lo sucedido, pero los escoceses salieron triunfantes.
Como decíamos antes, la película se rodó en 1948 en la calle principal de Castlebay, en la Isla de Barra, unos kilómetros al sur de la Isla real en la que tuvo lugar el hundimiento, “Island of Eriskay”.
Al parecer, el verano de 1948 fue el más lluvioso y ventoso desde hacía 80 años, lo cual dificultó mucho el rodaje que estaba planeado transcurrir en 5 semanas, las cuales aumentaron hasta 8 y el presupuesto tuvo que ser doblado. De hecho, el metraje no agradó nada a los estudios Ealing y lo tuvieron que reeditar. El que sí quedó contento con el resultado fue Mackendrick, el director glasgowiano de la película, además de las actuaciones de los protagonistas Basil Radford, Bruce Seton, Joan Greenwood y Gordon Jackson que fueron aclamadas por crítica y público.
La película ha sido parodiada muchos años más tarde en una serie televisiva británica llamada “Fast Show” donde hicieron el sketch “Heroin Galore” (Heroína a raudales), en el que el cargamento estaba formado por esta droga y no por whisky.
La explicación de esta parodia parece provenir de la exitosa película “Trainspotting” de Danny Boyle, la cual trata de un grupo de jóvenes escoceses adictos a la heroína y que ocupará nuestra atención más adelante.
Si quieres aprender algo más sobre el whisky escocés te podría interesar el siguiente artículo.
The Wicker Man (“El Hombre de Mimbre”), 1973
La película que presentamos ahora es mucho menos conocida y fue muy atacada por la crítica, aunque hoy en día ha ido cogiendo cada vez más fama y ya merece un estatus de película de culto. De hecho, en esta lista no puede faltar porque si tenemos que hablar de films que tomaron a Escocia como escenario para sus localizaciones, una de las más destacadas es, sin duda, “el Hombre de Mimbre”.
Aquí se recogen escenas grabadas en lugares tan dispares como Plockton, un pequeño pueblo de las Highlands que se caracteriza por tener un “microclima” que permite la presencia de palmeras, la Isla de Skye, la zona de Ayrshire y la región de Dumfries & Galloway.
(A continuación se desvelan partes de la trama)
La historia nos habla de la visita de un policía llamado Neil Howie a la remota y, de nuevo, ficticia Isla de “Summerisle” con la misión de encontrar a una chica desaparecida, la cual afirman nunca haber existido. Howie es un hombre muy devoto que se queda horrorizado cuando descubre que los habitantes de esta Isla practican una forma de paganismo celta que se sale completamente de los esquemas que él entiende como devoción religiosa.
Lo que le lleva a esta remota isla de las Hébridas es un escrito anónimo donde se le encomienda la misión de encontrar a una niña, Rowan Morrison, que lleva meses desaparecida. El desarrollo de la película se trunca todavía más cuando no sólo los habitantes de la Isla sino también la madre de la propia niña aseguran que ella nunca existió, llevando al policía a realizar una serie de investigaciones que mantienen en suspense al espectador durante todo el film, hasta llegar al apoteósico final.
El guionista, Shaffer, se inspiró en la novela “Ritual” de David Pinner para realizarla. En este relato también se habla de un joven policía que va en busca de una niña desaparecida, pero sobre todo tomaron la idea que impregna al libro sobre las religiones antiguas y paganas y de la tradición de los sacrificios a los dioses.
El nombre de la película lo recogió el propio guionista de un testimonio de Julio César acerca de las guerras galas donde aseguraba que las tribus locales ejecutaban a sus criminales más despiadados quemándoles vivos dentro de una especie de tejido de mimbre con forma de hombre (“The Wicker Man”). Para Shaffer fue “una de las imágenes más impresionantes e inquietantes que jamás haya imaginado” y por ello lo incluyó en la película.
Hay que mencionar también que entre las miles de fuentes de investigación que tomaron para estudiar las religiones ancestrales en conexión con las modernas, hubo un estudio que fue un pilar para la película: “The Golden Bough” (“La Rama Dorada: un estudio sobre magia y religión”), realizado por el antropólogo escocés James Frazer.
Por desgracia la película se rodó en momentos de crisis para la industria cinematográfica británica por lo que tuvieron que filmarla lo más rápido posible para ahorrar presupuesto. Esto supuso que la grabación se adelantara a octubre, cuando el guión estaba fijado para primavera, lo cual obligó a pegar, literalmente, hojas y capullos en flor en muchas escenas para simular esta estación de esplendor y florecimiento. Sobre todo si tenemos en cuenta que muchas de las ellas se rodaron en Escocia y que aquí nunca se sabe cuándo llegará la primavera, debió ser especialmente complicado para el equipo.
La mayoría de las escenas se grabaron en pequeños municipios de Gatehouse of Fleet, que se usó para las grabaciones exteriores del “Green Man” pub, Kirkcudbright, donde se grabaron las calles, tiendas y callejones para muchas escenas o Creetown, donde se nutrieron sobre todo los interiores del Hotel Ellangowan. Todas ellas se encuentran en la Región de Dumfries and Galloway.
Quedan así reflejadas varias regiones y entre ellas la pequeña villa costera de Plockton, donde aparece el protagonista, Howie, por primera vez.
Otras escenas se rodaron en los alrededores de la Isla de Whithorn, en el Castillo de Culzean en Ayrshire y algunas panoramas iniciales se tomaron sobrevolando las preciosas cumbres de “The Old Man of Storr” y de “Quiraing” en la Isla de Skye.
La quema final de “El Hombre de Mimbre” se hizo en “Burrow Head”, en la cima de una de sus colinas, muy propio para un sacrificio. Utilizaron dos estructuras de mimbre diferentes para la película y todavía hoy se puede observar los restos de una de ellas en este lugar.
Por último, hay que señalar que esta película también merece ser recordada como parte importante de la cultura escocesa porque su propia banda sonora utilizó arreglos de baladas de Sir Robert Burns, como por ejemplo para la canción de apertura “Corn Rigs” donde tomó partes de “The Highland Widow´s Lament” y “Rigs O´Barley”. Las partes instrumentales también deben mucho a la música tradicional escocesa, aunque también a la irlandesa e inglesa.
Esta película ha sido celebrada como una de las más terroríficas de su momento y se hizo un “remake” de la misma en el 2006, con Nicolas Cage como protagonista y bajo el control del director de la original, el inglés Robin Hardy.
Monty Python and the Holy Grail (“Los Caballeros de la Mesa Cuadrada”), 1975
Tenemos el honor de poder decir que esta película, hoy en día convertida en una de culto, fue rodada, casi por completo, en Escocia y, como todos los que la hayan visto sabrán, cuenta su versión particular de la historia del Rey Arturo y los Caballeros de la Mesa Redonda.
La película se realizó gracias a los seis célebres humoristas británicos Monty Python y se trata de la segunda en la lista desde el comienzo de su producción, tan sólo cuatro años anterior de la también conocida internacionalmente “La Vida de Brian”.
El Rey Arturo y sus Caballeros, en español traducido como “de la Mesa Cuadrada” y no redonda, se encuentran en medio de su “desaforada” búsqueda del Santo Grial, pero, como decíamos, no esperemos encontrar una típica película medieval de caballeros, espadas y caballos, porque en ésta, para empezar, nuestros caballeros no montan fornidos corceles sino que, debido a una tremenda carencia en el reino, los han tenido que reemplazar por sus propios sirvientes, los cuales les acompañan mientras van imitando el ruido de los golpes de cascos de los caballos por medio de cocos.
Nos encontraremos con escenas filmadas en Glen Coe, en Pertshire, en el páramo de Rannoch y en alguno de los muchos castillos que podemos encontrar en este país.
(A continuación se desvelan partes de la trama)
Las partes que encontramos rodadas en Glen Coe se sitúan exactamente en el “Meeting of Three Waters” (el Encuentro de las Tres Aguas) donde se filmó la escena del “Bridge of Death” (el Puente de la Muerte) casi al final del film. Un puente que se construyó a través de una cuerda levantada sobre un estrecho desfiladero. Pasados casi 40 años desde la realización de la película, la localización hoy día ha cambiado mucho, hasta tal punto que se dudaría de si realmente fue realizada en este lugar.
Podríamos hablar en detalle de todas las escenas rodadas del film en este país pero requeriría un estudio mucho más detallado, por lo que recordaremos otra de las fundamentales y que nos interesa especialmente porque lo visitamos con uno de nuestros tours estrella: Glasgow, en el que dejamos la parada final para conocer uno de los castillos más míticos de estas tierras: el Castillo de Doune y protagonista también en la cinta.
Este lugar aparece innumerables veces, tanto que representa cuatro fortalezas diferentes: el Castillo de Camelot, hogar del Rey Arturo; el Castillo del francés Guy de Lombard, el Castillo de Swamp y el Castillo Anthrax.
Se utilizó tantas veces de hecho porque les fue denegado el permiso de grabar en otros castillos tan sólo dos semanas antes del comienzo del rodaje. En ese momento el “Department of the Environment”, la entidad dedicada a la conservación de la mayoría del patrimonio en Escocia, decidió que debían cuidar de cualquier daño que se pudiera causar a sus castillos y tan sólo el Castillo de Doune, que en aquellos tiempos era propiedad privada, pudo ser tomado como escenario en la película.
Irónicamente hoy día la mayoría de visitas que recibe son precisamente por las conexiones que guarda con esta mítica película y, de hecho, los propios vigilantes y trabajadores del monumento ofrecen la posibilidad de llevar unos cocos para imitar a los sirvientes del film mientras se visita la fortaleza.
Gregory’s Girl, 1981
Esta bonita historia nos habla de un adolescente que está locamente enamorado de una chica de su clase y de cómo se las ingenia para llamar su atención y poder conquistarla. Una película dirigida, por cierto, por un escocés, Bill Forsyth, que más adelante crearía otro de los grandes aciertos de la filmografía del país: “Local Hero”, de la que luego hablaremos.
(A continuación se desvelan partes de la trama)
Todo transcurre en una pequeña localidad de Cumbernauld, en la escuela de Abronhill, que se encuentra a unos 25 km de la ciudad más grande de Escocia, Glasgow. Aquí será donde nuestro querido Gregory (John Gordon Sinclair), un chico singular y bastante torpe que juega en el equipo de fútbol del colegio conoce a Dorothy (Deep Hepburn), el nuevo fichaje del entrenador. Él la encuentra muy atractiva desde el principio, con la mala suerte de que el resto del equipo pensaba lo mismo, por lo que a Gregory le tocará competir dentro y fuera del campo de juego.
Se trata de una comedia entrañable y divertida con un tema algo trillado pero que el director supo enfrentar de una manera diferente, fuera de la escena de Hollywood y con muchos toques de humor ingenioso. La mayoría de los actores son de origen escocés y, de hecho, provenientes de la Escuela de Teatro de las Juventudes de Glasgow.
La mayor parte de las escenas se rodaron en el exterior de un Instituto real de la localidad de Abronhill y el resto de las secuencias se realizaron en los alrededores de Cumbernauld.
Una de las escenas más famosas y que tiene lugar hacia el final de la película se rodó en un parque cercano a Abronhill, donde se puede ver al protagonista bailando con una chica mientras están tumbados en el césped haciendo una coreografía, cuanto menos, curiosa.
Una peculiaridad de la película es que tuvieron que redoblar partes de la cinta para “anglicanizar” un poco el acento escocés de los actores ya que sabían que si no lo hacían, el público americano no los entendería. Todavía pueden encontrarse las dos versiones de la cinta disponibles.
Bill Forsyth creó alguna otra película, pero ninguna en comparación con ésta, que más adelante conllevaría una secuela llamada “Gregory´s Two Girls”, realizada en 1998. Pero, como decíamos antes, la que está considerada como su mejor película es la singular “Local Hero”, aunque también podríamos recomendar otras dos que le hicieron muy famoso, aunque ya dentro de su producción en Estados Unidos: “Comfort and Joy” de 1984, que fue rodada en su mayoría en la ciudad de Glasgow y “Being Human” de 1993, que tiene como actor protagonista a Robin Williams, pero que se grabó en su mayoría en las Tierras Altas escocesas y que fue la película que dio a conocer al actor Ewan McGregor dentro de un papel muy secundario.
Chariots of Fire (“Carros de Fuego”), 1981
La película británica de “Carros de Fuego” se rodó en 1981 y ha gozado de una fama impresionante. Fue premiada con cuatro Oscars dos años más tarde y está basada en la historia real de los deportistas olímpicos Eric Liddell y Harold Abrahams, ganadores de la medalla de oro en los Juegos de 1924.
Cuenta con muchísimas escenas grabadas en Escocia ya que uno de sus protagonistas, el segundo, era oriundo del país, por lo que aparecen lugares emblemáticos del Valle Sma, cerca de Perth, la playa de Saint Andrews y la propia ciudad de Edimburgo.
La vida de estos dos personajes tan diversos se narra caracterizando las singularidades de cada uno: Eric Liddell es un cristiano escocés muy devoto que decidió comenzar a correr por la Gloria de Dios y Harold Abrahams es un judío inglés que corre para intentar vencer la discriminación intolerable que tiene que soportar.
Al parecer la película se inspiró en un poema del literato inglés William Blake, “Jerusalem”, y su canto se puede escuchar al final del film donde literalmente se dice “Bring me my Chariot of Fire” (“Tráeme mi Carro de Fuego”) tomado directamente del Libro de los Reyes del Antiguo Testamento. Hoy en día se utiliza como refrán proveniente de la Biblia que viene a significar una especie de “energía divina” que sale del interior del ser humano, muy acorde con la potencia de la frase.
(A continuación se desvelan partes de la trama)
En la película se representan los Juegos de las Highlands de 1926 y aparece rodado en el Valle de Sma, cerca de Crieff y de la ciudad de Perth.
Es una de las pocas que escoge también la capital escocesa como lugar para emplazar alguna de sus escenas. Las más destacadas se rodaron en dos lugares emblemáticos de la ciudad, una en el Parque de Holyrood donde Eric Liddell (Ian Charleson) aparece caminando con su hermana Jennie (Cheryl Campbell), momento en que le anuncia su intención de volverse a China con las misiones. Podemos ver como aparece de telón de fondo la imponente colina de Arthur´s Seat, una de las más emblemáticas de la ciudad.
Encontramos otra en Edimburgo, donde aparece el protagonista escocés de nuevo dirigiéndose apurado a una de sus reuniones religiosas, que tiene lugar en uno de los edificios más representativos: el “New College”. Se trata del edificio que acoge la Facultad de Teología en la ciudad y se conoce como “la Iglesia de Escocia”. La construcción es del siglo XIX y se sitúa en un emplazamiento privilegiado en una especie de montículo artificial que tiene la ciudad conocido como “The Mound” y permite unas vistas maravillosas hacia la Ciudad Nueva de Edimburgo.
Pero sin duda las escenas más conocidas del film que fueron grabadas en Escocia las tomaron en la ciudad costera de Saint Andrews, donde aparecen sus preciosas playas de arena de la zona Norte de la ciudad, para el comienzo y para el cierre del film, además de algunas tomas sueltas de Eric entrenando a mitad de la película.
Local Hero (“Un Tipo Genial”), 1983
Tratamos otra de las grandes películas, conocida a nivel internacional, que también tienen su base en Escocia. Del mismo director de “Gregory´s Girl”, Bill Forsyth, se creó esta soberbia comedia estrenada en 1983 y que trata el conflicto entre una compañía petrolera de Texas y los astutos residentes de una ficticia y pequeña localidad pesquera de Escocia llamada Ferness, situada en la costa Oeste de Escocia y cuya tierra requería un grupo de americanos para formar una nueva base de petróleo en el Mar del Norte.
(A continuación se desvelan partes de la trama)
El protagonista, Mac (Peter Riegert), es enviado a esta localidad para estudiar el terreno, pero finalmente descubrirá que los maquiavélicos planes de su jefe en Houston, Felix Happer (Burt Lancaster), son en realidad reemplazar el encantador pueblo escocés por su refinería petrolera, aunque las cosas no irán como el dirigente esperaba.
Aunque la localidad de la que hablan es ficticia todo el equipo se trasladó a Escocia para rodar la película y la mayoría de localizaciones del film fueron en este país. Aparecen lugares tan dispares como Arisaig en las Tierras Altas, Banffshire, la destilería de Ben Nevis, el famoso pueblo de Fort William, el Lago Eil, Mallaig, Moidart y muchas más, pero sin duda la más importante es la localización protagonista en el pueblo de Pennan, que se encuentra en la región de Aberdeenshire y que es el lugar que se escogió para representar a la localidad ficticia de Ferness.
Al comienzo del film, cuando Mac y su compañero Oldsen (Peter Capaldi), representante local de la petrolera, se encuentran ya en Escocia, aparecen en una carretera dirigiéndose al pueblo de Ferness, entre Glenuig y Kinlochmoidart. En la escena se puede apreciar un lago en la distancia que es el Lago Moidart, cercano al Castillo de Tioram.
En la propia imagen podréis apreciar un paisaje escocés muy típico con un clima también muy propio de estas tierras: carretera estrecha entre montañas, rodeado de espacios verdes, agua que puede provenir de un lago o río y la niebla y el cielo nublado envolviendo la panorámica.
La niebla lo va cubriendo todo cada vez más, como así es inherente a esta zona, hasta que los dos protagonistas del film se bajan del coche para admirar otro de los cientos de lagos que tenemos en Escocia, en este caso el Lago Tarff, en las cercanías del pueblo de Fort Augustus, en el lado este del mismo Lago Ness.
Otra de las escenas más características es en la que aparece el baile típico escocés, una de sus Ceilidh. Se trata de una reunión en sociedad que proviene de la tradición celta y que requiere música y baile folclórico de esta misma cultura. Estas escenas fueron rodadas en la población de Banff.
Una vez en Ferness, que como decíamos se rodó en la localidad de Pennan, aparece la famosa cabina roja de la película, colocada en ese lugar como parte del escenario y de la utilería que utilizaron en la cinta porque al parecer la que había en el pueblo no estaba situada en el lugar correcto para que encajara estéticamente en el fotograma. Hoy día se conserva y se ha convertido en una auténtica atracción turística a modo de reliquia, ya que nadie abandona el pueblo de Pennan sin una foto en la cabina roja de “Local Hero” y en el hotel que aparece en la película que, por cierto, también fue una alteración que introdujeron los miembros del rodaje.
Pero no sólo las localizaciones tienen carácter escocés sino que la propia banda sonora también es propia de estas tierras, porque fue compuesta e interpretada por el archiconocido Mark Knopfler, del grupo Dire Straits, y está considerado como uno de sus mejores trabajos.
En este video podrán disfrutar de uno de sus temas más famosos, “Going Home”, convertido hoy día en un hit gracias a la película.
Highlander (“Los Inmortales”), 1986
Tratamos ahora una película fantástica pero que toma de nuevo el escenario escocés y parte de su historia de clanes como parte importante del film.
(A continuación se desvelan partes de la trama)
Todo comienza en la ciudad de Nueva York con su protagonista, Russel Nash (Christopher Lambert) en una escena que le sume en una especie de batalla que, en un principio, el espectador no entiende. Inmediatamente, nos trasladan con un flashback a una época pasada que tiene como fondo las Highlands escocesas, concretamente Glenfinnan, un precioso valle cercano al famoso pueblo de Fort William.
Aquí nuestro protagonista se convierte en Connor MacLeod, un hombre de la primera mitad del siglo XVI que se encuentra en lucha con varios clanes vecinos. Inmediatamente nos llevan a una batalla en la que un gigante de 2 metros conocido como “El Kurgan” intenta asesinar al protagonista a toda costa al identificarle como un pre-inmortal. MacLeod comienza a tener sensaciones bastante raras y, tras ser herido de muerte por el gigante y recuperarse de forma “demasiado milagrosa”, su propio pueblo decide condenarle a muerte por utilizar armas de brujería, pero éste conseguirá escapar al exilio para trabajar como herrero en otro de los valles más famosos que tenemos en las Tierras Altas escocesas: Glencoe.
Tras unos años llevando una vida tranquila con su esposa se muestra el encuentro con otro inmortal algo más maduro, el actor escocés Sean Connery, en el papel de Juan Sánchez Villa-Lobos Ramírez. Será éste el que le haga despertar y entender su propia condición de inmortal y el que le dará consejos de cómo llevar a cabo su vida teniendo en cuenta su situación, a lo que MacLeod le hará poco caso porque intentará llevar una vida lo más normal posible, hasta darse el inevitable fallecimiento de su amada esposa, Heather (Beatie Edney). Después de enterrarla decide quemar su casa y vagar por el mundo.
Tras este extenso flashback nos traslada de nuevo al mundo actual, 1985, en Nueva York, donde tendrá lugar el desenlace final de la película, “The Gathering” (“La Reunión”).
Esta película tuvo tal éxito en la época que no sólo se creó una secuela de películas del mismo nombre y temática, sino también una serie televisiva.
Pero lo importante y lo que aquí nos ocupa es que es una de las películas que más escenas ha rodado en Escocia, tomando sus maravillosos parajes como marco perfecto también para una película fantasiosa. Aparecen secuencias en el famoso castillo de Eilean Donan, en el Glen Nevis, en el Lago Shiel, en Torridon y en la Isla de Skye.
Sin duda alguna se trata de una de las películas que más deben a la inspiración de los paisajes escoceses y que además cuenta, como decíamos antes, con una de las figuras más excelentes del cine escocés, Sean Connery.
Braveheart (“Corazón Valiente”), 1995
Qué decir a cerca de la película que más visitantes ha atraído al país del héroe William Wallace, protagonista del film. Quizás lo primero sería tener en cuenta que esta película tiene tantos admiradores como enemigos por tierras escocesas, ya que están aquellos que piensan que ha sido una película excelente y entrañable, que resalta el carácter guerrero y fiel de los escoceses, pero por otro lado nos encontramos a los que la repudian por considerarla un pastiche hollywoodiense mal basado en los hechos históricos (si quieres saber cuáles son puedes leer este artículo).
Sea como fuere, se trata seguro de un drama histórico situado durante las Guerras de Independencia de Escocia contra Inglaterra, las cuales duraron casi un siglo, desde finales del siglo XIII hasta bien entrada la segunda mitad del siglo XIV. Sobra decir que fue protagonizada por el también director de la misma, Mel Gibson, encarnando el papel de Wallace, el cual vivió los primeros momentos de estas guerras. Al parecer lo que inspiró a Mel Gibson para realizar esta película fue una composición lírica escrita por el poeta escocés Blind Harry un siglo y medio más tarde de la muerte de éste: “The Actes and Deidis of the Illustrate and Vallyeant Campioun Schir William Wallace” (“Hechos y hazañas del ilustre y valeroso triunfador William Wallace”). Se trata de un poema romántico y “biográfico” que conmemora y elogia la vida y acciones del guerrero libertario William Wallace.
Debido a que se escribió un siglo y medio después de su muerte es algo impreciso con los hechos históricos e incluso narra varios pasajes que nunca sucedieron, ya que el objetivo principal era enaltecer al héroe nacional. Al igual que la película, este libro también tuvo gran éxito tras su publicación, y es que fue ¡el segundo libro más leído durante siglos en Escocia después de la Biblia!
Varios siglos más tarde, concretamente en 1996, se realizó la versión cinematográfica del poema con el guión de Randall Wallace, “Braveheart”, que ha sido descrita como una de las películas modernas más inexactas a la hora de documentarse históricamente, aunque premiada infinitas veces como mejor imagen fotográfica y como mejor director.
(A continuación se desvelan partes de la trama)
A William Wallace le tocó una vida nada sencilla, un contexto en el que el rey de Inglaterra Eduardo I “Longshanks” (“el piernas largas”) o también conocido como “the Hammer of the Scots” (“el Martillo de los Escoceses”) decidió invadir y conquistar Escocia tras haber hecho lo mismo antes en Gales. Tuvo que ver morir a su padre y a su hermano y fue criado en Roma por su tío Argyle, hasta que alcanzó la edad adulta y decidió volver a su tierra natal.
Lo que se encuentra a su regreso no será para nada de su agrado porque entre muchas de las tiranas leyes que este rey había dictaminado en su tierra se contaba una que le perjudicaría directamente: “the right of the lord to have sex with a woman subject on her wedding night”, lo que denominaríamos en español como la “expresión de derecho pernada”, en la cual se permite al señor feudal el derecho a mantener relaciones sexuales con la casta prometida la noche antes de la boda. Precisamente es lo que le ocurrirá a William Wallace tras enamorarse y contraer matrimonio en secreto con Murron MacClannough. Fueron descubiertos y un soldado inglés trató de violarla, cosa que Wallace intentó evitar violentamente y trajo como resultado la ejecución de Murron por parte del oficial inglés.
De este modo es como el guionista presenta el inicio del drama en la película, nada más allá de los hechos reales, pero que queda perfecto en una trama de Hollywood y, desde luego, funciona para conmover al público y hacerles partícipes del sentimiento de odio al inglés.
A partir de entonces, se convierte en una película bélica donde sí se representa una de las batallas históricas más importantes de lasGuerras de Independencia: la Batalla del Puente de Stirling, donde gracias a las estrategias de Wallace, los escoceses salieron victoriosos siendo un ejército mucho más reducido que el inglés. Será aquí donde aparezca el siguiente protagonista de la historia, Robert the Bruce, el joven noble pretendiente a la corona escocesa y que acabó siendo representado como un traidor en la película, cosa que realmente ofendió a muchos escoceses porque este hombre, que luego fue rey, está considerado como un héroe nacional en este país y, de hecho, como el verdadero “corazón valiente”.
A partir de esta batalla los hechos históricos y los novelescos se mezclan sin piedad hasta desencadenar en la cruenta ejecución de Wallace, esta sí mejor basada en los hechos reales, porque es digna de película. Fue declarado culpable por traición a la corona inglesa y llevado a la Torre de Londres donde le ahorcaron, arrastraron y descuartizaron públicamente.
Lo que probablemente no sea verdad es que cuando los ingleses le pidieron que gritara “Mercy” (“misericordia”) él gritó “Freedom” (“libertad”). Lo que cuentan los anales históricos es que antes de la ejecución fue coronado con una guirnalda de roble sugiriendo que era el rey de los bandidos. Parece que en vez de gritar el famoso “libertad” de la película lo que en realidad dijo fue: “I could not be a traitor to Edward, for I was never his subject” (“Nunca pude ser traidor a Eduardo ya que nunca fui su vasallo”).
Siempre se ha dicho que los escoceses estaban muy decepcionados con la película porque ninguna escena se grabó en esta tierra sino en Irlanda, pero las tomas del principio cuando todavía es un niño sí fueron rodadas en Escocia, concretamente encontramos algunas grabadas en el Valle de “Glen Nevis” y en el Valle de “Glen Coe”.
Les guste o no a los escoceses la película es un tema aparte, porque si alguno viene con el objetivo de ver a William Wallace tenga por seguro que lo conseguirá. En Edimburgo tenemos el privilegio de contar con la presencia diaria de nuestro William Wallace particular, un señor de Edimburgo que se pinta la cara de blanco y azul y viste su falda escocesa, a la “versión Gibson”, se coloca siempre a escasos metros de la entrada al Castillo y no dudará en pegar un grito de guerra atronador con su “freedom” a cambio de unas monedas, con foto incluida.
También podremos encontrar una estatua en honor a este personaje histórico en el arco de entrada que flanquea el Castillo, junto con el que fue rey, Robert the Bruce, además de un monumento en honor al primero en la ciudad de Stirling, construido en la segunda mitad del siglo XIX, gracias a subvenciones públicas y donaciones de países extranjeros.
Os dejamos con el tema principal de la película porque puede que ésta no gustara a todos pero la banda sonora, realizada por James Horner, desde luego emociona.
Trainspotting I, 1996 y Trainspotting II, 2017
Hasta ahora hemos hablado de películas de ficción, cómicas, históricas, de terror, … pero ahora cambiamos de tercio completamente para tratar una que podríamos catalogar como comedia negra o drama y que trata un tema difícil de digerir pero que tras su estreno alcanzó una inmensa fama.
Está basada en la novela del escocés Irvine Welsh del mismo nombre y trata la vida de un joven llamado Mark Renton, interpretado por el también escocés Ewan McGregor, un actor de gran renombre en el mundo cinematográfico. Aquí representa a un joven escocés con pocas perspectivas y menos ambiciones de vida que le ha tocado vivir durante una crisis económica en la ciudad de Edimburgo.
Como muchos de sus amigos, Renton es un heroinómano que ama esa sensación placentera de inconsciencia que esta droga provoca. A sus mejores amigos, Sick Boy (John Lee Miller), un chico simple obsesionado con James Bond y Spud (Ewan Bremner), un inocente inadaptado en la sociedad y ambos también adictos a la heroína, se les une el pulcro atleta Tommy y el sociópata Begbie.
Todos ellos forman un curioso grupo que representa algo que realmente ocurrió en la capital escocesa durante la década de los 80, un problema general de drogodependencia entre los jóvenes, que se dio sobre todo en la zona del barrio de Leith.
(A continuación se desvelan partes de la trama)
La película comienza con el intento por parte del protagonista de dejar esta terrible droga y toma la decisión de mudarse a Londres, donde encuentra un trabajo y un apartamento, algo cercano a la paz mental que le permitiera alejarse de la locura de Edimburgo. Sin embargo, Sick Boy, Begbie y Spull aparecerán repentinamente en su casa para introducirle de nuevo en el mundo de las drogas y el crimen.
Aunque la historia en el libro estaba ambientada en la ciudad de Edimburgo, la mayoría de las escenas se rodaron en Glasgow, exceptuando las de apertura y cierre del film que se hicieron en Edimburgo y Londres respectivamente.
El primer cuadro muestra a Ewan McGregor corriendo por la calle de Princes Street mientras el grupo de amigos es perseguido por los vigilantes de seguridad de una tienda en la que acaban de robar, por supuesto, para comprar más droga. La persecución termina en Calton Road, una zona cercana al barrio de Leith, donde el protagonista se choca con un vehículo, sin sufrir daños.
El resto de la película, como decíamos toma sus localizaciones en Glasgow, Londres y también en una localidad de las Tierras Altas, Lochaber, desde donde se divisa el Leum Uilleim, donde Tommy les sugiere escalar hasta su cima.
Esta película se convirtió desde su estreno en 1996 en la mejor película británica de ese año y la cuarta mejor de toda la historia del cine británico en aquella fecha.
En el año 2017 han grabado una segunda parte de esta película, donde Edimburgo ha vuelto a tomar escena.
Sweet Sixteen (“Felices Dieciséis”), 2001
Seguimos tratando un tema enrevesado que incluye jóvenes sumidos en el mundo de las drogas, delincuencia y situación social precaria, pero con algunos cambios. El protagonista, Liam (Martin Compston), es un adolescente inquieto de 15 años que vive en una Escocia suburbial de la zona de Greenock, muy cercana a Glasgow, y que se encuentra a las orillas del inmenso río Clyde. Está esperando la puesta en libertad de su madre, Jean (Michelle Coulter), que está pagando por un crimen que su novio Stan (Gary McCormack), un arisco narcotraficante, cometió.
(A continuación se desvelan partes de la trama)
Liam está decidido a crear un ambiente mejor para su madre, su hermana Chantelle (Annmarie Fulton) y su pequeño sobrino Callum, para el día en que Jean salga en libertad, tan sólo un día antes de que él cumpla dieciséis.
Las cosas se le complican cuando se da cuenta de que ni siquiera puede conseguir un hogar para ellos ya que no tiene trabajo, por lo que decide dedicarse primero a vender cigarrillos robados de bar en bar para sacar algo de dinero y luego a vender las drogas que le había robado a su padrastro a los yonquis del barrio, consiguiendo así mayor cantidad de dinero en el menor tiempo posible. Todas estas actividades le hacen a él y su mejor amigo, Pinball (William Ruane), entrar en un ambiente corrupto, de rabia y venganza hasta el punto en que ya no puedan controlar la situación y se desate más aún la tragedia.
Se trata del cuarto guión escrito por Paul Laverty y una de las muchas buenas películas realizadas por el director inglés Ken Loach, conocido por sus creaciones dentro del “realismo social” y siempre preocupado por denunciar la situación de la clase trabajadora con ejemplos concretos, como el niño escocés de “Sweet Sixteen”, casi obligado a tener que llevar una vida de delincuencia para poder impresionar a su madre.
Más adelante le volveremos a tratar al hablar de otra película mucho más actual y de temática típicamente escocesa: “The Angel’s Share”
Harry Potter (2001)
Para hablar de la saga de Harry Potter y su repercusión escocesa primero tendríamos que decir que no todas tuvieron escenas rodadas en este país. De las ocho películas con las que cuenta, cuatro de ellas sí que utilizaron Escocia como escenario en alguna secuencia.
La primera de ellas fue “Harry Potter y la Piedra Filosofal” de 2001 y, aunque la mayoría de la película se rodó en Inglaterra, las escenas más espectaculares se grabaron en Escocia, donde este reconocido mago aparece en el pueblo de Fort William y en el Glen Nevis.
“Harry Potter y la Cámara Secreta” se filmó tan sólo un año después que la anterior, 2002, y aquí utilizaron más el impresionante escenario escocés donde se pueden encontrar escenas rodadas en el Glen Nevis, en los Lagos Shiel y Eilt y, el especialmente mítico viaducto de Glenfinnan. A continuación aparecen dos fotogramas de la película en este último lugar mostrando la secuencia de un coche que sale volando. Este viaducto llega desde Fort William hasta la vía férrea de Mallaig y se extiende por todo el Valle de Glenfinnan. Al fondo de la imagen se pueden adivinar las orillas del Lago Shiel.
Esta vez no fue tan sencillo elegir a Escocia como escenario y, según cuenta el periódico “Daily Record”, la experiencia que tuvieron con el mal tiempo escocés en las entregas anteriores hizo que las cintas rodadas aquí sólo se presentaran en el rodaje de “segunda unidad”, es decir, donde se ruedan los planos en exteriores que requieren algún tipo especial de atención por suponer una dificultad extra.
Por último, hay que mencionar la que se realizó en el año 2006 , que se llamó “Harry Potter y el prisionero de Azkaban” en la que comenzaron a rodar en el 2003, de nuevo, en Glen Coe. Lo más destacado de esta última fue el increíble escenario que se construyeron en una de las montañas de Glen Coe como parte del decorado del film. Estamos hablando de una escenografía que les costó entorno a unos 2 millones de libras construir. Todo el equipo de rodaje se trasladó a esta hondonada de Glen Coe y construyeron una especie de campamento improvisado con cabañas, furgonetas y caravanas para asentarse durante este tiempo. Todavía hoy se pueden ver señales de peligro y de no acceso de las que se utilizaron durante la grabación.
Como muchos ya sabrán, la escritora de estos exitosos libros, J.K. Rowling, es de origen inglés pero escribió el primero de los libros en la capital escocesa, Edimburgo. El origen y las primeras páginas surgieron en una cafetería céntrica que hoy se ha convertido casi en lugar de peregrinaje para los fans del libro, “The Elephant House”.
Pero si de verdad os interesa conocer los entresijos y localizaciones de esta película os recomendamos hacer el tour que hemos preparado especialmente con esta temática. Aquí podrán empaparse durante 10 horas de las historias y curiosidades más singulares del mago más famoso de las Islas Británicas. Además, si quieréis aprender algo más sobre las relaciones entre Escocia y Harry Potter antes de visitar este maravilloso país, podéis leer este artículo.
The Da Vinci Code (“El Código Da Vinci”), 2006
“El Código Da Vinci” está basada en el best seller del escritor americano Dan Brown del mismo nombre.
Las secuencias del final apoteósico decidieron rodarse en la Capilla medieval del siglo XV, “Rosslyn Chapel” y el Castillo de la misma localidad, que se encuentra a escasos kilómetros de Edimburgo, en la región de “Edinburgh and the Lothians”.
La película tiene como protagonistas al profesor de Harvard Robert Langdon (Tom Hanks) y a la criptógrafa francesa Sophie Neveu (Audrey Tautou) los cuales tienen que resolver toda una serie de extravagantes acertijos y seguir la pista a la que conducen algunas de las obras de Leonardo Da Vinci. Si no consiguieran descifrar el enigma final y atar todas las piezas del rompecabezas, una increíble verdad histórica se perdería para siempre.
Para conocer todos los misterios que se guardan en esta capilla tenemos un tour exclusivo con su nombre que no sólo visita esta capilla sino una abadía, la de Melrose, también plagada de historia y todo envuelto en mitad de la naturaleza que caracteriza a las Tierras Bajas escocesas, mucho menos conocidas y con un encanto particular.
James Bond
Al igual que en Harry Potter resulta complicado establecer las localizaciones escocesas que se han hecho de estas películas. La primera cuenta con 8 partes, pero es que la de James Bond tiene ni más ni menos que ¡23 películas!
Por supuesto, en este caso no podemos tener en cuenta la secuencia cronológica que estábamos siguiendo, aunque sí lo vamos a hacer a la hora de mencionar las que usaron algún fondo de escenario en Escocia en este breve comentario.
Pero antes de empezar a hablar de algunas de ellas habría que hacer el apunte de que la primera película que se hizo de James Bond, “Dr. No” (1962) que no tuvo ninguna de sus escenas grabadas en este país, pero algo escocés sí que tomaron, y fue su actor principal, representando el papel del detective más famoso del cine: el escocés Sean Connery.
Al año siguiente se grabó la que dicen ser la mejor de las 23 que se han hecho: “Desde Rusia con Amor” y, de nuevo, estuvo protagonizada por Connery pero además esta vez sí tuvieron en cuenta la tierra del intérprete y se trasladaron para rodar una de las escenas finales a Escocia. Lo que se representa es una de esas inverosímiles pero fantásticas escenas de persecución que caracterizan a la serie de Bond, esta vez en helicóptero y bote, y que se filmaron en la zona de Argyll, en el Lago Craignish.
“La Espía que me amó” de 1977 es la décima que se grabó y ya aparece protagonizada por el que se convertiría en el James Bond por excelencia, Roger Moore. La última actuación de Sean Connery se hizo en 1971 y el siguiente “007” sería este actor inglés, que lo fue desde 1973 hasta 1985, haciendo de él el veterano Bond, tanto por el tiempo como por la edad, ya que personificó al detective desde los 45 hasta los 58 años. La zona de Escocia que aparece en el film es, de nuevo Argyll, donde se situó la base naval británica.
Para buscar otra localización escocesa en las películas de James Bond tenemos que dar un salto muy grande en el tiempo hasta 1999, cuando en “El mundo nunca es suficiente” aparece el Castillo de Eilean Donan representando el Castillo de Thane que servía de cuartel general del Mi6.
Por último, la más reciente de todas las de Bond, “Skyfall” (2012), es la número 23 y tendrá también a Escocia como escenario y, de hecho, es la primera desde los días de actuación de Roger Moore en tener escenas grabadas aquí. Los días destinados a rodar en este país fueron sólo dos y el momento álgido de estas escenas fue grabado, en realidad, en una zona cercana a Aldershot, que se encuentra en el sur de Inglaterra, por lo que las montañas propias de las Highlands tuvieron que ser añadidas de forma digital.
En la imagen vemos a lo lejos al nuevo James Bond, Daniel Craig, en el Glen Etive, muy cercano al famoso valle de Glen Coe, el cual también hace aparición en el film. Éste se nos presenta en un plano mostrando una de las típicas carreteras de las Tierras Altas, de un solo sentido, con montañas siempre de fondo y plagadas normalmente de una densa niebla.
Stardust (2007)
Esta película es una cautivadora fantasía a modo de cuento de hadas basada en los comics y novelas de Neil Gaiman, un autor inglés de historias cortas de ficción, de novelas, cómics, novelas gráficas, películas, etc. Comienza con una estrella que cae en la Tierra, un hombre enamora a una mujer, la enemistad entre unos hermanos conjura un asesinato, un reino necesita un rey y, en medio de este enredo, un grupo de brujas buscan la juventud eterna. Una trama con muchas historias entrelazadas y, por supuesto, con una buena dosis de escenario escocés.
(A continuación se desvelan partes de la trama)
Al principio de la película aparece una de las protagonistas, Lamia (Michelle Pfeiffer) en una de las zonas más al norte de la Isla de Skye, en Quiraing que se encuentra en la cima de Trottenish Ridge. Esta zona aparece de nuevo más adelante con planos desempeñados por Tristan (Charlie Cox) e Yvaine (Claire Danes).
Más adelante vemos cómo Lamia continúa su recorrido por la carretera con su carro tirado por cabras antes de ver la caravana, algo más sosa, de Sal (Melanie Hill) aparcada cerca de un pequeño lago. Estas escenas se filmaron en el Fairy Glen, cerca de Uig, también en la Isla de Skye, una zona muy característica por sus numerosos montículos cónicos.
Es muy conocida también la fantasiosa escena rodada en Bealach na Ba, en la que el bote del capitán Shakespeare (Robert De Niro) aparece en lo alto de una montaña, un mirador que se utiliza además dos veces en la película cada vez con un punto de vista distinto para que se pueda apreciar su belleza.
The Eagle
Esta película está basada en un best-seller escrito en 1954 por la novelista británica, Rosemary Sutcliff, conocida por sus numerosas historias de ficción histórica para niños. Este film concretamente nos sitúa en el peligroso mundo del siglo II d.C. cuando, tras desaparecer de forma inesperada la “Novena Legión” (Ninth Spanish Legion/Legio IX Hispana/Novena Legión “hispana”) entre las montañas escocesas, un joven centurión llamado Marcus Aquila llega desde Roma para resolver este misterio y restablecer la reputación de su padre, el comandante de los Ninth. Acompañado únicamente del esclavo británico Esca, ambos atravesarán el Muro de Adriano entre las inexploradas tierras de la entonces Caledonia (nombre romano que recibió Escocia) donde tendrán que enfrentarse a las tribus salvajes, salvaguardar la memoria de su padre y recuperar el emblema dorado perdido de la legión: “the Eagle of the Ninth” (el Águila de la Novena Legión).
En esta imagen puede observarse a los dos “perseguidores” en una parada para admirar las espléndidas vistas de las montañas abriéndose en la distancia. Estas escenas se rodaron en lo alto de “Bealach na Ba” (Paso del Rebaño) cerca de Applecross, muy cerca de la famosa Isla de Skye y que tiene una de las carreteras más amplias del Reino Unido
En el extenso recorrido que hicieron por Escocia se llegó hasta bien al Norte porque la pequeña villa llamada “Seal People” en la película que fue grabada muy cerca de Polbain, situada en la zona más alnoroeste de Escocia, contemplando lasIslas Summer y que forman un archipiélago en la boca del Loch Broom, dentro de las región de las Tierras Altas.
Salmon Fishing in Yemen (“La Pesca del Salmón en Yemen”), 2011
Esta película, una comedia romántica, tiene ya de por sí denominación de origen escocesa porque su propio actor protagonista, Ewan McGregor es uno de los actores más reputados a nivel internacional y ya ha salido varias veces en este breve repaso. Representa el papel del doctor Alfred Jones, un científico del sector pesquero. La película trata las posibilidades y dificultades de introducir el salmón de aguas frías del Atlántico para la pesca en la zona del Yemen, por petición de un jeque árabe.
La película se rodó en Londres, en Marruecos y, por supuesto, en Escocia, la reina de la pesca del salmón después de Noruega. La pesca de salmón está considerada uno de los motores más importantes de la economía del país.
En la película aparece, además del río Spey, el segundo más largo de toda Escocia, también esta casa señorial a modo de Castillo de hadas que es la conocida Ardverikie House, situada en las Tierras Altas escocesas, en la orilla norte del Lago Laggan.
Brave
Les hablamos ahora de una película que no pudo ser grabada aquí por razones obvias, se trata de un film de animación, pero todo su escenario digital está construido teniendo en cuenta el paisaje de estas tierras.
(A continuación se desvelan partes de la trama)
Se trata de una Escocia, la de las Tierras Altas, abrupta y situada en un tiempo mítico. La protagonista, la indomable del film, es la tierna pero testaruda Mérida, una niña aspirante a arquera y, sobre todo, efusiva hija de los reyes. Tras un enfado con sus padres por el papel protocolario que se niega a cumplir, toma la imprudente decisión de lanzarse ella sola en una aventura por las tierras escocesas que supondrá todo un reto plagado de hazañas y que desencadenará en una progresiva madurez del joven personaje principal.
Es una de las últimas películas de Pixar y la primera en contar con una mujer a la dirección, Brenda Chapman y como personaje principal, Mérida. La voz en inglés de la pequeña protagonista se la puso la actriz escocesa Kelly MacDonald, ya que quisieron darle ese cálido acento propio escocés, al igual que al resto de personajes. Esta última también colaboró en la película que tratábamos antes, Trainspotting, esta vez como actriz, encarnando a la joven adolescente que tiene un romance con Renton (McGregor).
Prometeus (2012)
Esta película simplemente queremos mencionarla porque es uno de los últimos estrenos de ciencia ficción que tomaron a Escocia, de nuevo, como escenario para alguna toma y también por el renombrado director que la rodó, Ridley Scott. Al ser una película fantástica la mayoría de escenas se filmaron tomando como escenario un planeta a años luz de distancia pero, como decíamos, un par de escenas se rodaron aquí, y fue, concretamente, en la Isla de Skye.
Lo que se puede observar en la imagen superior son las famosas formaciones rocosas de “Old man of Storr” de la Isla, en la zona norte de la población de Portree. Aparecen al comienzo de la película y Ridley Scott lo sitúa en el año 2089.
The Angel’s Share (“La Parte de los ángeles”), 2012
Presentamos ahora uno de los últimos estrenos del director inglés Ken Loach que rompe con sus “típicos” temas sobrios, deprimentes y, en definitiva, en clave de denuncia social. Aquí trata una comedia propiamente escocesa que habla de la historia de un joven de Glasgow llamado Robbie (Paul Brannigan) que acaba de ser padre e intenta evitar a toda costa sus serios problemas con la ley ya que espera un destino mejor para su pequeño. Será una visita a una destilería de whisky con sus amigos Albert (Gary Mailand), Mo (Jasmin Riggins) y Rhino (William Ruane) –este último, por cierto, también hace de “mejor amigo” del protagonista en la película de la que hablábamos antes del mismo director, “Sweet Sixteen”- la que les haga buscar una solución para cambiar sus banales e inútiles vidas.
Por supuesto, gran parte de la película fue rodada en Escocia y en varios lugares, desde las grandes ciudades de Glasgow y Edimburgo, pasando por los parajes naturales del Lago Lomond y Ardgartan hasta las destilerías de Glengoyne, Balblair y Deanston. Ésta última, por cierto, la visitamos en profundidad en uno de nuestros tours estrella: Stirling.
(A continuación se desvelan partes de la trama)
Al comienzo de la película aparecen los personajes pagando los servicios comunitarios a los que han sido condenados y, de repente Harry (John Henshaw), el encargado de supervisar su trabajo, le lleva al hospital porque su novia está a punto de dar a luz. Para celebrarlo Harry lleva al grupo a una destilería de whisky donde aprenden lo que “the angels’s share” significa. Se trata de la porción (share) de vino que se pierde por la evaporación durante el envejecimiento en los barriles de roble y, fue esto precisamente, lo que inspiró la película. Después de contarles la historia del whisky todos ellos lo prueban y Robbie parece tener una habilidad especial para detectar los sabores que componen cada uno ellos por lo que Harry le invita a una cata mucho más seria en Edimburgo.
Poco a poco los miembros del grupo comienzan a hacerse más conocedores de las propiedades de un buen whisky de malta y a planear todo tipo de tretas para enriquecerse a costa de este nuevo campo, el del whisky, del que jamás habían pensado que se podrían beneficiar.
La escena final se cierra con una de las canciones más famosas en Escocia, el “500 miles” de los The Proclaimers, un grupo escocés compuesto por dos hermanos gemelos, Charlie y Craig Reid. Aquí les dejamos con la canción para refrescar la memoria porque seguro que a todos, al menos, les sonará.
Sunshine on Leith (2013)
Terminamos nuestro apasionante repaso por la filmografía escocesa con el último estreno rodado en su mayoría en la capital, Edimburgo, basado en la obra teatral del mismo nombre y con banda sonora de los recién mencionados “The Proclaimers”.
La película narra la historia de Davy (George Mackay) y Ally (Kevin Guthrie) que tienen que volver a recordar cómo vivir sus vidas en Edimburgo tras regresar de su servicio militar en Afganistán. A ambos les costará mucho recordar cómo era su vida fuera del ejército y tendrán que enfrentarse con las dificultades que a veces supone lidiar con la familia, el trabajo, los amigos y las relaciones sentimentales.
Estamos hablando de un alegre musical que se desarrolla por las calles de Edimburgo, que nos habla del poder y la importancia del hogar, la familia y el amor. El nombre del mismo se refiere a uno de los barrios más famosos de la ciudad, Leith.
Si quieren dar un paseo por la ciudad de Edimburgo, sus zonas más señeras y en días soleados no tiene más que darle al “play” para disfrutar de este melódico film y luego sacarse un billete de avión para experimentar las cosas maravillosas que esta ciudad y este país ofrecen.
Esperamos que hayas disfrutado de este breve repaso a las películas que han tomado la historia escocesa, sus paisajes o su singular estilo de vida y gentes para llevarlo a la pantalla grande. Se podrían hablar de muchísimas más pero se han recogido las que hemos considerado tienen una importancia especial, ya sea porque el escenario escocés es protagonista, porque aparece en la trama o porque los actores o directores son oriundos de estas tierras. En cualquier caso queríamos mostrar cómo también en el campo cinematográfico Escocia se erige como un lugar inspirador para películas, en ocasiones, de gran renombre internacional.
Muy buena la lista. Se me ocurren algunas más, aquí os las dejo:
Burke and Hare. Una de las grandes industrias de Edimburgo es la universidad y otra es el turismo y aparentemente se le debe bastante a estos dos pillos jejeje
http://www.imdb.com/title/tt1320239/
Tambien interesante la pelicula que nos enseña las tripas del imponente hotel Balmoral de Edimburgo.
Hallan Foe. Una extraña película que merece la pena solo por las preciosas vistas de la “Old Town” desde el reloj del hotel.
http://www.filmaffinity.com/en/film636208.html
Tambien rodada en Edimburgo la primerísima película del gran Danny Boyle que conocemos por su oscarizada Slumdog Millionaire y como no Trainspotting.
Shallow Grave. Rodada en el tipiquísimo piso compartido edimburgués. No tan típico lo que sucede.
http://www.filmaffinity.com/en/film632981.html
Y una que habrán visto nuestros padres tropecientos millones de veces y que tiene una fotografía de Escocia preciosa es “La Vida Privada de Sherlock Holmes”
http://www.filmaffinity.com/es/film933645.html
Ahi os dejo las que se me han ocurrido.
Enorme el trabajo que estais haciendo chicos!!
Ánimo ahí y suerte
Se me ocurre ésta: Rob Roy
http://www.filmaffinity.com/es/film622895.html
“The film was shot entirely on location in Scotland, much of it in parts of the Highlands so remote they had to be reached by helicopter. Glen Coe, Glen Nevis, and Glen Tarbert can be seen. In the opening scenes, Rob and his men pass by Loch Leven. Loch Morar stood in for Loch Lomond, on the banks of which the real Rob Roy lived. Scenes of the Duke of Argyll’s estate were shot at Castle Tioram, the Marquess of Montrose’s at Drummond Castle. Shots of “The Factor’s Inn” were filmed outside Megginch Castle. Crichton Castle was used in a landscape shot.” Fuente: wikipedia.