Última actualización octubre 2024
¿Nos acompañas a dar un paseo por la zona señorial de la ciudad de Edimburgo? En las siguientes líneas nos detendremos en sus edificios, museos y espacios verdes: la calle de Princes Street, plagada de sus peculiares tiendas de souvenirs escoceses y de ropa; hablaremos brevemente de algunos de los alojamientos más transitados por esta zona: los hoteles, bed and breakfast y hostales que más escogen los viajeros; visitaremos los pubs y restaurantes más conocidos de Rose Street, una calle peatonal llena de posibilidades para comer y divertirse. ¿Preparados? ¡Ah! Y no os quedéis sólo con esto porque también hay que pasear por la zona histórica de la Old Town de Edimburgo y por el Barrio de Leith, donde también hemos incluido nuestras pequeñas sugerencias para el viajero más inquieto.
Breve introducción histórica
¿Qué es la ciudad nueva de Edimburgo y cuál es su origen?
Podríamos decir que la construcción de la ciudad nueva fue una especie de escapatoria para las clases altas, cansadas de los hacinamientos, los malos olores y las condiciones insalubres en general que se respiraban en la ciudad vieja de Edimburgo desde que se construyera la Muralla de Flodden en 1513. Estamos hablando de que esta nueva zona de la ciudad se va a plantear a partir de la segunda mitad del siglo XVIII, por lo que la convivencia de clases y condiciones terribles se extendió durante casi dos siglos.
La ciudad vieja de Edimburgo durante el siglo XVII. Wikipedia.org
Aquí tenemos una imagen de lo que sería esta ciudad antigua con sus viviendas apelotonadas, calles sin salida y, por supuesto, sin alcantarillado. Lo que es hoy la ciudad nueva se encontraría en la parte más alejada de esta imagen superior, lo que viene a ser la zona Norte de la ciudad y que antiguamente estaba ocupado por el apestoso Lago de Nor´Loch.
No será hasta el año concreto de 1766 que se plantee y planee la distribución de las calles que formarían la New Town. Su aspecto actual se lo debemos al jovencísimo arquitecto ganador de la competición de este gran proyecto, James Craig. El diseño original es bastante curioso y se conserva casi totalmente hoy día; estaba basado en la “Union Flag“, la que conocemos hoy día como bandera del Reino Unido, en la cual convergen la cruz de San Jorge – patrón de Inglaterra – y la cruz de San Andrés – patrón de Escocia, que intentaban mostrarse vinculadas más que nunca tras las intensas y sangrientas luchas Jacobitas que habían hecho tambalear esta Unión.
Plano original del arquitecto que diseñó la ciudad nueva de Edimburgo, James Craig
Como vemos en el plano superior, todas las calles que forman parte de esta nueva zona tienen una fuerte simbología unionista y, sobre todo, monárquica:
– La calle principal se llama George Street, divide esta “ciudad” señorial en dos partes, es la más prestigiosa de las que hay en Edimburgo y se le dió este nombre por el monarca que reinaba en ese momento, George III.
– La calle de Queen Street se llamó así en honor a la mujer de este último y Princes Street (hoy día una de las más conocidas dentro de la ciudad por ser el centro neurálgico del “shopping” en Edimburgo), se nombró así en honor a los hijos del mismo rey, ambos varones y, por ello, se escribe sólo con una “s”, para formar el plural de “príncipe”. Esta aclaración es sólo para no llevar a confusión porque mucha gente lo traduce como “la calle de la Princesa”, pero de esta manera tendría que escribirse “Princess Street”. Esta última originalmente se iba a llamar St Giles Street, patrón de Edimburgo, de los enfermos de peste y de los tullidos, como la iglesia más famosa de la Old Town, pero finalmente se decantaron por el de “la Calle de los Príncipes“.
– Las dos plazas de los extremos iban a recibir el nombre de St George´s Square – nombre del rey y patrón de Inglaterra – y St Andrew´s Square – patrón de Escocia- (de izquierda a derecha), y así se llama todavía la segunda, pero la primera cambió su apelativo por el de “Charlotte Square“, nombre de la esposa de Jorge III.
– Las calles que llevan los nombres de los emblemas de Escocia e Inglaterra son “Thistle Street” y “Rose Street“, respectivamente. La primera significa “la calle del Cardo“, flor de Escocia, y la segunda es la de la rosa, flor de Inglaterra. La segunda es una calle peatonal llena de pubs y restaurantes donde siempre puede uno salir y divertirse; si lo hacemos antes de la 1 de la madrugada, claro…
– Por último, “Hanover Street” tomó el nombre de la casa dinástica inglesa que reinaba en aquel momento, la alemana Casa de los Hannover que acabó triunfando en Reino Unido. “Frederick Street” honraba el nombre del padre del rey Jorge III.
Vista de la ciudad nueva de Edimburgo desde el Castillo, con el estuario del Forth al fondo – geograph.org.uk Kim Traynor
Con esta fotografía de la ciudad nueva podemos, más o menos, hacernos una idea de todo lo que abarca y la apariencia que tienen sus edificios. Lo que más llama la atención, en contraste con la ciudad vieja, es el entramado de las calles que, aquí, podemos apreciar cómo se ordenaron dentro de una red de calles de trazado ortogonal, mucho más ordenadas que en la zona de la Old Town. Además de esto, la estética de sus edificios nada tiene que ver con la medieval de los de la Old Town, ya que ahora le darán un carácter decimonónico muy afín a la famosa arquitectura georgiana o neoclásica que pretendía recuperar la grandiosidad de la belleza clásica.
Casa georgiana en la ciudad nueva – wikipedia.org Kim Traynor
¿Qué supuso la ciudad nueva de Edimburgo?
Casualidad o no, la construcción de esta New Town coincidió con un periodo de esplendor impresionante en todos los campos intelectuales a partir del siglo XIX, lo cual hizo que a esta ciudad se la conociera con el apelativo de “la Atenas del Norte“, y no sería precisamente por las semejanzas con el clima de la capital griega… Aún así, su arquitectura era “similar”, tenía y tiene una colina a modo de Acrópolis- la conocidísima Calton Hill – y, como decía, tuvo su pequeña época de oro en lo que ellos conocen como el “Scottish Enlightenment“.
Edificios históricos, monumentos y museos
La ciudad nueva de Edimburgo cuenta con edificios y museos de una importancia clave para la ciudad y son, desde luego, de visita obligada. Si venimos con prisa y sin tiempo que perder, lo mejor será hacer una lista de los más importantes e ir directos a los espacios y obras clave.
1. Galería Nacional de Escocia
Galería Nacional de Escocia en The Mound. Wikipedia.org Klaus with
Lo primero que no nos podemos perder es la Galería Nacional de Escocia. Se encuentra en la zona norte de la ciudad, en un espacio histórico muy curioso que recibe el nombre de “The Mound“ y que es el lugar que antiguamente quedaba ocupado por el Lago defensivo de Nor´Loch. El edificio que guarda la galería tiene un estilo neoclásico que se escapa completamente del la estética dada a las viviendas de la ciudad nueva y, por supuesto, a la ciudad vieja en general.
Este museo recoge una impresionante colección que data desde finales del gótico hasta las primeras vanguardias del siglo XX, con unas obras pioneras y de una influencia definitiva en cada uno de sus movimientos, sirva de ejemplo “La Virgen Adorando al Niño” de Boticelli, “El Festín de Herodes” de Rubens o el “Autorretrato con 51 años” de Rembrandt. En la planta de abajo nos presentan una extensa muestra de los maestros pictóricos escoceses, de entre las que cabe destacar el famosísimo “Skating Minister” de Henry Raeburn.
2. Scott Monument
La torre ennegrecida que se levanta eminente en la zona más hacia el este de la calle de Princes Street y que parece salida de un cuento de hadas, se dedica ni más ni menos que al novelista romántico escocés Sir Walter Scott. Se trata del monumento más alto jamás erigido a un literato y, la verdad, que alto es un rato ya que para alcanzar su punto más alto hay que salvar los 287 escalones que se distribuyen a lo largo de sus más de 60 metros de altura. Realmente, merece la pena subir. Sólo advertimos a los claustrofóbicos que mejor se abstengan porque la escalera es de caracol y se va estrechando conforme asciende.
Además de disfrutar de unas maravillosas vistas de toda la ciudad, en cada una de sus alturas hay un pequeño museo en honor al autor escocés además de una estatua del mismo acompañado de su amigo más preciado, su perro Maida.
3. Calton Hill
Vista de Calton Hill con sus monumentos. wikipedia.org Saffron Blaze
El monumento de Sir Walter Scott merece la pena por sus vistas, pero Calton Hill es el lugar que a todo el mundo se le viene a la cabeza cuando quiere ver la ciudad y sus atardeceres desde lo alto. Otro de los tantos volcanes extintos que se encuentran en la ciudad de Edimburgo, Calton está considerado Patrimonio de la Humanidad por la UNESO y guarda en su cima alguno de los monumentos más importantes de la ciudad como la especie de Partenón llamado “Monumento Nacional de Escocia“, la torre “Monumento del almirante Nelson“, el templo vestal dedicado al filósofo escocés Dugald Stewart, el observatorio astronómico, etc.
4. La Casa Georgiana
Fachada de la Georgian House en Charlotte Square – wikipedia.org Kim Traynor
La casa Georgiana es uno de los edificios más queridos por los escoceses y una muestra irremplazable del soberbio estilo arquitectónico georgiano que imperó durante todo el siglo XIX.
Podríamos decir que estos son los lugares más importantes para visitar en esta zona de la ciudad, en cuanto a monumentos se refiere, pero si tenemos tiempo, no hay que dejar de acercarse a la Galería Nacional Escocesa del Retrato en Queen Street y a la Galería de Arte Moderno en Belford Road, muy cerquita del riachuelo de Leith. En el propio jardín de Princes encontramos un teatro al aire libre que se conoce como el Ross Theatre, utilizado mayormente para fuegos artificiales, danza y conciertos de música clásica. Si alguien se ha quedado con más ganas de arte, no dejéis de visitar las galerías más famosas de la ciudad nueva: Open Eye, Saatchi, Edinburgh Printmakers, Randolph o la de Urban Art.
Espacios y edificios religiosos
1. Iglesia de St. John y St. Cuthbert
Iglesia de St John y St Cuthbert. antiquemapsandprints.com
Quizás lo que más impresiona a todos cuando entran en la zona oeste de Princes Street son las dos moles gigantes de piedra que se levantan como primer plano a uno de los numerosísimos cementerios que hay en la ciudad, que son las iglesias de St John y St Cuthbert. La primera de ellas episcopal y la segunda presbiteriana, guardan una apariencia muy diversa la una de la otra y, por su puesto, ordenan cultos con rituales totalmente distintos. Abajo podréis ver un grabado con la misma apariencia exterior que guardan hoy.
El cementerio que queda a sus espaldas tiene un aspecto muy romántico, como casi todos los que hay en Edimburgo, y cuando uno pasea entre sus tumbas se pueden encontrar nombres tan conocidos como el del literato inglés Thomas de Quincey, Robert Pont o John Napier. Para hacernos una idea de muchos otros cementerios que podemos visitar tanto en la ciudad nueva como en la vieja, podéis echar una ojeada a nuestra guía de cementerios en Edimburgo, donde también hablamos del cementerio de Calton o el de Dean.
2. La Catedral de St Andrews
Iglesia St Andrews en la ciudad nueva de Edimburgo – wikipedia.org Kim Traynor
Esta Iglesia pertenece a la congregación de la “Iglesia de Escocia” – Church of Scotland-, de confesión presbiteriana y fue pensada para emplazar en un lugar que finalmente ocupó la vivienda de un adinerado edimburgués, por lo que hoy la podremos encontrar en la calle de George Street, la principal de la New Town, pero no en la plaza que lleva su mismo nombre, como así estaba previsto. Al exterior encontramos un edificio pétreo con un pináculo que alcanza a la vista casi desde cualquier punto de la ciudad, pero al exterior tiene una decoración bastante “moderna” y algo chillona para lo que en un templo de culto estamos acostumbrados.
3. La Catedral Episcopal de St Mary
Catedral Episcopal de St Mary – wikipedia.org Jon
La Catedral Episcopal de St Mary es, sin duda, un edificio de visita obligada para los amantes de la arquitectura en general y, sobre todo, de la religiosa, ya que se trata de un templo de piedra, colosal, realizado a finales del siglo XIX a imitación de las grandes catedrales góticas del medievo. Coronada con dos torres gemelas diseñadas por el jefe de obras, Sir George Gilbert Scott, es la catedral más grande de toda Escocia.
4. La Catedral Católica de St Mary
La catedral Católica de St Mary – wikipedia.org Michael T R B Turnbull
Podríamos decir que la catedral católica de St Mary se remonta a principios del siglo VIII, pero ha habido tantos cambios dentro de su estructura que la que nos encontramos hoy en día en la zona más al Oeste de Leith tiene poco que ver con su vetusta amiga del VIII. La mayor parte de lo que vemos hoy pertenece al siglo XIX, concretamente al año 1814, momento en el cual se celebró la primera misa dentro del recinTo reconstruido. No es tan impresionante como la anterior pero también merece una visita.
Espacios verdes
Como os habréis podido imaginar, en Edimburgo podremos carecer de muchas cosas, pero zonas verdes y agua es algo que, por suerte, invade toda la ciudad y le da su aspecto tan característico. Qué sería de Edimburgo sin sus parques, jardines, montañas, lagos, riachuelos y su salida al mar… sería, simplemente, otra ciudad. Vamos a indicar entonces algunos de los más bonitos, de los imprescindibles, para los que vengan con poco tiempo en su visita a Edimburgo.
1. Los Jardines de Princes Street
Vista de los jardines de Princes – wikimedia.org Ulayiti
Estos impresionantes jardines separan la ciudad nueva de la vieja y se sitúan en el lugar que antiguamente emplazaba el lago artificial defensivo de Nor´ Loch. Desde luego que son los más visitados tanto por visitantes como por los propios vecinos de Edimburgo por su localización tan céntrica y por su belleza.
2. Calton Hill
Calton Hill – wikimedia.org Andrewyuill
Sobre esta colina ya hemos hablado infinidad de veces y seguiremos haciéndolo sin parar porque tiene un encanto muy especial y unas vistas que cortan la respiración. Por ello vamos a dedicarle un breve texto en exclusiva para enterarnos bien de su historia y de lo que guarda en su cima.
3. Charlotte Square Gardens
The Albert Memorial, Charlotte Square Gardens, Edinburgh – flickr.com Robert Cutts
Estos jardines no son tan transitados por los viajeros pero también habría que pasar a verlos ya que se encuentran rodeados de la arquitectura victoriana más pura de la ciudad nueva y, si vemos una imagen aérea, parecen casi una especie de oasis en medio de los edificios urbanos. En ellos se celebran eventos, entre los que destaca el Festival Internacional del libro.
4. Dean Village
Viviendas del Dean Village – wikimedia.org Paul Mcilroy
No podríamos decir que Dean Village sea un parque para visitar o un jardín donde practicar algún deporte. Lo que sí es, es una zona verde de la ciudad, pero casi habría que definirla más como un lugar de retiro.
Un espacio en el que no hay ruidos contaminantes de la ciudad, sólo se oyen los pájaros y la corriente del riachuelo. Es por ello que los artistas y bohemios de la urbe han elegido este pequeño refugio para que sea su vivienda en Edimburgo (los que se lo pueden permitir…). Se encuentra algo alejado del centro de la ciudad y por ello mucha gente se lo pierde, pero desde Princes Street se puede ir andando o coger un autobús de línea. Si lo que realmente te apetece es que te lo cuente un experto, puedes consultar nuestro Tour Panorámico que tiene una parada exclusiva en esta zona tan especial de la capital escocesa.
De compras en la ciudad nueva de Edimburgo
Jenners al interior en Princes Street – wikimedia.org Christian Bickel
Algunas de las tiendas más transitadas son, como es lógico, también las más asequibles, como por ejemplo M&S, H&M, Zara, Primark, Accessorize, River Island, New Look y un largo etc.
Otro de los grandes almacenes con más prestigio de esta zona son los Harvey Nichols, los cuales ofrecen prendas de ropa de mujer y hombre, productos de belleza, restaurante, bar e incluso mercado de comida de lujo. Se encuentran en St Andrew Square, muy cerca de la estación de autobuses de Edimburgo. Otra de las opciones, para los más frioleros, es dar una vuelta por los dos centros comerciales que se encuentran en el extremo más hacia el este: Princes Mall y St James Quarter.
Para los compradores/as más exclusivos también existe una zona muy cerca de la plaza de St Andrews donde se encuentran las tiendas de mayor “cachet”, como por ejemplo Hugo Boss, Louis Vuitton, Mulberry, G-Star, Calvin Klein, etc.
No nos olvidemos del shopping de productos alimenticios frescos de primera mano que tan difíciles son de conseguir en Escocia porque, por suerte, todos los domingos se celebra un mercadillo de género orgánico desde las 10h hasta las 16h en el barrio residencial de Stockbridge que llevan organizando desde 2011.
Puerta de Stockbridge y su mercado (aunque por aquí no se accede al mercadillo de los domingos) – flickr.com gnomonic
Además de pasear por una de las zonas más chic de la ciudad, con sus edificios empedrados que acompañan el curso del Water of Leith, podremos probar manjares que no se encuentran en los supermercados: aceitunas variadas y patés, verduras de huerta, quesos y panes franceses, crepes para acompañar el recorrido, pescado fresco, fruta, etc.
Pubs y restaurantes
Ahora viene la parte preferida por muchos y una de las más prácticas, porque habrá que aderezar las visitas de museos, monumentos, parques y eventos con algo de comida y bebida, ¿no creéis? Así que vamos a hacer un breve repaso de aquellos que recomendamos directamente porque la oferta de pubs y restaurantes es extensísima.
1. Pubs
– La primera toma de contacto con los pubs en la New Town la podemos hacer en un lugar muy curioso como es el pub que hoy se asienta en el interior de lo que antiguamente era un colosal edificio ocupado por un banco, el famosísimo Standing Order. Su filiación al campo de las finanzas ha hecho que hoy su decoración y su espacio se vean afectadas por ello. Cuando normalmente los pubs son de unas dimensiones más bien reducidas este cuenta, sin embargo, con innumerables mesas y espacios en la barra y, por supuesto, la caja fuerte que antaño fue la custodia de sus bienes más preciados. Aún así, siempre se las apañan para llenarlo porque los precios son francamente asequibles.
Interior del hoy pub Standing Order – geograph.com Kim traynor
– The Basement es un bar algo más escondido dentro de la ciudad nueva porque de hecho se encuentra en una especie de subsuelo típico entre las viviendas de esta zona. Por ello, suele pasar desapercibido entre los visitantes, aunque los habitantes de Edimburgo lo conocemos bien y por ello normalmente está llenito de gente. La comida que encontramos en The Basement está inspirada en los manjares de México y de Sudamérica en general: guacamole, huevos rancheros, quesadillas, ceviche, albóndigas, fajitas, enchiladas, frijoles, etc.
– Otro bastante curioso, aunque algo agobiante, es el pub llamado Dirty Dick´s Bar, el cual podría ser el más “auténtico” de entre los tres que llevamos nombrados, teniendo en cuenta que se encuentra en la zona turística de la ciudad, en Rose Street. Pero aquí también encontraremos comida escocesa al más puro estilo tradicional: pastel de carne, salchichas con puré de patatas, Haggis con puré de patatas y nabos, pollo empanado, gambas rebozadas, etc.
– Escondido en una de tantas calles silenciosas que encierra la New Town, nos encontramos el entrañable pub de The Cumberland Bar, algo más subido de precio, pero todavía practicable. Aquí podemos encontrar una gran selección de la cerveza típica de Escocia, las “Ales“, aunque también se pueden encontrar las típicas cervezas rubias, tostadas y negras. Lo que más llama la atención de este lugar, sin duda, es su “beer garden“, un pequeño patio escondido que se agradece mucho durante los días de sol.
Hay muchísimos más pero, al igual que con los restaurantes a continuación, hemos hecho un breve repaso de aquellos que consideramos merecen una visita, pero no descartéis el entrar a cualquiera que os llame la atención porque siempre os podéis llevar alguna sorpresa.
2. Restaurantes
– El restaurante Chaophraya en Edimburgo es un lugar privilegiado, ya que se sitúa en una azotea de esta zona histórica de la ciudad, con vistas directas al Castillo de Edimburgo, perfecto para los enamorados o para disfrutar de una cena con encanto. La comida es principalmente tailandesa dentro de un ambiente muy lujoso, con estilo y con una gran oferta de cócteles. El lugar perfecto para al que le apetezca una noche glamurosa en su visita a Edimburgo.
– The Dome, es otro de esos lugares que aparece en todas las guías de viaje por la grandiosidad de su apariencia. Un lugar muy bien decorado, con los techos muy altos, lujo por todas partes, etc., pero es un sitio al que no debemos temer entrar por cuidar nuestro bolsillo aún con toda su ostentosa apariencia. Se sitúa en el corazón de la ciudad nueva de Edimburgo, en la calle de George St y lleva funcionando como restaurante y bar desde 1996 y sirve para todo tipo de eventos: comidas entre amigos, bodas, afternoon tea, cenas de empresa, etc.
Interior del restaurante The Dome con su árbol de Navidad inmenso – flickr.com Edinburgh Blog
– Para los amantes del pescado y el marisco, tenemos el famosísimo Mussel Inn, situado en Rose Street, donde nos podemos encontrar productos frescos y típicos junto con vecinos de la ciudad que también lo escogen como restaurante predilecto para los días que apetece producto marino. Una buena selección de pescados y mariscos, entre los que no puede faltar una fuente de mejillones con salsas, como ellos lo preparan.
– Uno que ofrece también comida escocesa pero mucho más sofisticada y dentro de un ambiente romántico y lujoso es el restaurante Number One, que se encuentra en la céntrica calle de Princes Street. En este lugar se pueden degustar manjares de todo tipo, desde vieiras, almejas, langosta o mejillones, hasta pato, risotto, cordero o una selección de quesos, que ellos suelen tomar de postre.
De nuevo, existen muchísimos más, pero dejamos estos cuatro anteriores como referencia y ya iremos ampliando con un post dedicado en exclusiva a los mejores restaurantes de la ciudad nueva.
Alojamiento
Como os podéis imaginar, en la zona señorial de la ciudad, no podemos encontrar otra cosa más que una enorme oferta de alojamientos lujosos y de alto estándar, pero siempre hay cabida para lugares algo más económicos dependiendo de la temporada en la que se viaje.
– Alguno de los alojamientos de calidad alta son, por ejemplo, el Hotel Balmoral, uno de los más lujosos de la ciudad, porque además se creó dentro de un edificio histórico. En esta misma línea, pero un poquito menos lujoso, podemos optar por el InterContinental Edinburgh The George. Si preferimos algo un poco más estándar, podemos optar por hoteles Bed and breakfast de categoría media-alta como el Motel One de Princes Street o el Ibis de St Andrews Square. Un precio un poco más moderado lo encontramos en el Ballantrae Hotel.
– Si nos vamos a lo más económico que podemos encontrar, ya estamos hablando de albergues (hostels), cuyos precios dependerán de con cuánta gente compartas la habitación. En la New Town podemos encontrar, por ejemplo, el St Christopher´s Inn.